sábado, 28 de febrero de 2009

Párate a pensar que estás haciendo aquí.
Ahora, mientras lees estas, mis palabras, mi triste llanto seco.
El recorrido que has hecho, aún sin moverte de tu cómodo asiento, puede ser enorme. Quizá en ese trayecto hayas crecido. Juraría que sí. Yo misma he crecido en el intervalo de tiempo que fue desde el nacimiento de la idea de este pseudotexto hasta su desarrollo.
Probablemente no me estés entendiendo. Ni siquiera yo tengo muy claro lo que quiero decir. A lo mejor solamente querría darte el consejo que a mí nunca me dieron, esa ayuda con la que nunca pude contar… en el fondo sé que no puedo hacerlo.
Por eso escribo. Y a pesar de que no tengo ninguna frase histórica que soltar, a pesar de que no diré nada que te cambie la vida, me estás leyendo.
A pesar de todo, puede que también tú busques algo, ese algo que yo tampoco encuentro… eso que mueve el mundo. Y esa búsqueda te ha traído a mi nuevo hogar, una línea cualquiera que salta en la pantalla.
Nunca me gustó la metaliteratura y sin embargo la hago. Nunca me gusté a mí misma y por eso me vuelvo más horrible a cada instante.
Seguramente tengas problemas mucho más terribles de lo que nunca fueron los míos. No obstante, me gustaría decirte algo: entiérralos y sal afuera a saborear el sol porque no sabes cuando te enterrarán en vida tus propios miedos.
Yo me desperté un día siendo una suicida silenciosa que tiró literalmente su vida por el retrete.
Pero puede que tú aún estés a tiempo de sentir aunque solo sea una última vez el llanto alegre del viento secando tu cara. Sal, sal, sal a ponerle azúcar a tu última cena.
TÚ, EL QUE ME LEES, AÚN ESTÁS VIVO.

viernes, 27 de febrero de 2009

Cuando lanzo dos dados, siempre sale trece

La vida es un juego. Solamente eso, un juego al que no se nos da bien jugar. Hagamos lo que hagamos, siempre acabamos perdiendo. Y algunos no saben todo lo que ganan cuando pierden!

jueves, 26 de febrero de 2009

Qué me queda?

Qué hacer cuando se acaba el oro, la fama, el poder?
Cuando se acaba el color dorado de tu paleta y las miradas parece que crecen desde las alturas?
-Aún te quedan tus sueños.
-Qué hacer cuando se acaban tus ilusiones, cuando todas tus luces están apagadas, cuando te pierdes en el camino?
-Aún te quedaré yo.
-Pero... y cuando se acaba el amor? Cuando te sientes sola, cuando buscas miradas y encuentras espaldas, cuando buscas hogar y solo encuentras puertas cerradas? Qué hacer cuando cuando no tienes a nadie que llore tu desgracia con sus ojos?
-Aún te tienes a tí.
-Y si en ese momento te encuentras en una batalla contigo misma. Y cuando tú eres tu peor enemiga. Cuando te odias, cuando no encuentras paz, cuando no existe silencio interior. Cuando sientes que tus penas mandan más que tu propia voluntad.
Cuando te has perdido a ti misma... qué te queda?
-_-_-_-_-_-_-
Pandora miró en el fondo de su caja y vió que quedaba la esperanza. Yo he mirado en mi interior y solo veo restos de las plumas con las que solía volar al cielo.
Me siento como Rodolfo en la Bohème, quemando los papeles que contienen horas de mi poesía para poder resguardarme aunque solo sea un momento del frío de este invierno que no acaba de terminar...

miércoles, 25 de febrero de 2009

Y que nuestro manto sean las estrellas

-Mira como brillan las estrellas esta noche!
-Parecen tus ojos.
-Quizá en algún lugar de alguna de ellas, dos personas miren al cielo con los ojos brillantes.
-Sabes, he estado pensando en como sería mi vida si no te hubiese encontrado.
-Ah sí?
-Sí. Ahora sé que si no te hubiese conocido, ahora mismo tampoco me conocería a mí misma. Porque tú eres ese espejo nítido donde me veo cristalina, tal y como soy. Porque eres ese espacio donde verdaderamente puedo ser yo misma. Cada noche que paso contigo es un sueño y cada día sueño con volver a soñar contigo. A pesar de que no seamos nada, eres mi todo.
-De verdad crees que no somos nada?
-Claro. Todo lo que siento solo me ha servido para enamorarte una noche.
-DOS.
-...una.
-Cero. Bésame.
-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-
A cada una las 168 horas que vengo de vivir.
De nuevo me siento viva(:

jueves, 5 de febrero de 2009

Otra historia estúpida

Una noche de hace algún tiempo, soñé con una isla extraña.
Allí, un mar cargado de muerte jugaba conmigo. Creía que me sostendría mansamente entre sus aguas y en lugar de eso, me ahogué en medio de una tormenta de emociones.
Mi espíritu fue condenado a vagar por un desierto rodeado de oasis en los que no debería entrar, pues tenía miedo de que esas pequeñas lagunas volviesen a llenar de agua duramente salada mis pulmones. Tenía miedo de ellas, a pesar de su pequeño tamaño, a pesar de su agua dulce. Ellas eran el reflejo de aquel mar que tiempo atrás había traicionado todos mis deseos.
Caminé durante lo que parecían siglos viendo como otra gente podía refrescarse, nadar o incluso vivir en esos pequeños paraísos, sabiendo que eses placeres nunca serían para mí. Por extraño que resulte, una llega a acostumbrarse al dolor. Llegó un punto en el que mis maltratados pies estaban tan hinchados que ya no sentían el dolor, pero perdieron la facultad de bailar. Llegó un momento en el que mi seca garganta ya no sentía sed, pero se quedo muda y dejó de cantar. Mi atormentada alma dejó de sufrir pero quedo huérfana de amor.
Cuando mi corazón se estaba ya olvidando de cómo se latía, apareció ante mí un segundo mar. Un mar sin malas intenciones que me llevó hasta su playa y me enseñó a hacer castillos en su arena. Inevitablemente, me enamoré de él. Sin embargo, un terror oscuro llenaba aún mi alma. Él era exactamente igual que el mar que yo había imaginado dentro de mí, ese mar inexistente que me había enamorado. Por eso, no quería arriesgarme a volver a ahogarme.
Me decidí por la opción más estúpida: abandonar mis travesías por el océano para siempre y crear un hogar en la ciudad. Aquí, cada noche lloró un nuevo mar, triste y silencioso, intensamente escondido… un mar muy personal, un mar que es doloroso, pero es mucho mas mío que yo misma.
FIN (?)
.
.
.
Me ha robado mi poesía... me ha robado a mí misma y quiero que me devuelva.
Foto de tinkampinho, genio desaparecido.
Qué tengo que hacer?